Una vez más, el vórtice de cornobovinolandia me ha llevado a grandes aventuras.
El jueves por la tarde, como cada jueves, hubo otra fantástica sesión de cine club. Esta vez vimos Un perro andaluz y Dogville, ambas excelentes obras. Charlando con Manuel (sí, el del link) sobre el cortometraje, recordé a Rocha, profesor de literatura. De acuerdo a él, El perro Andaluz es una crítica al trato que se le daba a la mujer en tiempos de Dalí y Buñuel... tendré que evaluarlo, pero me parece una idea sumamente interesante.
Dogville, por su parte, me trajo toda una serie de recuerdos, y si bien me encantó, dejó una suerte de pequeña marca traumática.
Después de ver las pelis, procedimos a charlar, y pues como suele suceder, el debate se convirtió en una charla sobre todo tipo de cosas... como siempre, una charla amena y un buen rato... además, tuvimos la oportunidad Ilse y yo de medio matar a Pepe (y a veces Pepe de medio matarnos)... después de eso, por fin procedimos a buscar la bedida para ir a casa de Ilse a ver más pelis. Julio, Pepe, Beto, Daniel (aka Freak), Ilse y yo fuimos en mi auto... debo confesar que fue toda una aventura, ya que manejar solo es muy distinto a llevar un aproximado de media tonelada de gente.
Estando en Wal-mart, tuvimos un fortunado reencuentro con los monstruos de la cinematografía que se venden a $32... y claro, no podíamos dejar ir otra vez a los Cholos del Asfalto. Esta película se convirtió en regalo de no-cumpleaños para la joven Ilse.
De Wal-mart huímos al centro y durante el camino comí malvaviscos (a veces no por pedirlos, sino porque Pepe los usaba para callarme ¬¬), y nos dispusimos a ver Cholos y Trainspotting. Cabe mencionar que esperaba ansiosamente Trainspotting nada más para escuchar la canción Mile End, de Pulp (escena en la que Renton, que ya vive solo y trabaja vendiendo casa, se ve invadido por Frank, quien está escondiéndose de la policía después de robar una joyería).
Durante Cholos, debo confesar, me dormí a ratitos (oh, pecado), pero eso sí, lo que ví me causó mucha mucha gracia. Después de ello vimos Trainspotting. Julio se durmió a ratos durante dicha película, y la pobre de Ilse se traumó con la escena de la pequeña Dawn.
Después de ello hubo un bonito episodio en el balcón... Coca-cola volando hacia autos pasantes, llamadas de atención... Eventualmente nos fuimos a dormir un par de horas, y de ahí a la escuela, de nuevo.
Fue en la escuela que me topé una vez más con el destino: un boleto libre para la graduación de la primera generación como para que yo lo tomara. Tras mucha planeación (gracias Adi por arreglar lo de mi vestido), parecía que Pato y yo iríamos a la graduación. ¡Ah, dulce emoción de ir por primera vez a una fiesta con Pato! y no una fiesta cualquiera... sino el histórico evento de ver a la 1a generación de genómicos liberarse hehehe. En algún momento de estos, ocurrió el triste evento de que Ilse no pudiese ir a la graduación, lo cual llevaría a una aventura más...
Pero bueno. Llegó el sábado por la mañana. Con todo y el horror de levantarme temprano, y el doble horror de toparme con que no había agua caliente, fui al encuentro de Pato [felicidad exorbirante]. No negaré que la tarde fue increíble...desde la ayuda con las labores caseras, comer hamburguesas, helado de cereza y chocolate, y el largo rato de charla habo una enredadera de jazmín hasta la ayuda para caminar con tacones en piso empedrado, todo fue más que increíble.
Al llegar al salón, nos topamos con el oh gran problema del día. Resulta ser que por fallas serias de comunicación entre Fanny y yo, para cuando me dí cuenta solo había un boleto y pues Patoy yo somos dos... es en este momento en que los héroes del día acudieron a salvarme: Primero, Miss Claudia y Rocío. Ellas se llevan mi rotundo agradecimiento... de verdad gracias, son geniales. En 2o lugar queda mi padre... ¿qué haría yo sin ti?
Cena, un par de fotos, y mucha emoción en la graduación. ¿Qué pasó?
1. Un emotivo discurso de Romero (awwwwww de verdad fue un bello momento)
2. Siesta ... ah, no... que diga, discurso de Santa.
3. Presentación de fotos de la 1a generación y comentarios grabados.
4. Brindis
5. Mucho baile [gracias patito, por esforzarte y bailar ... no dejas de sorprenderme]
6. El momento surreal del día [para pato]: chilaquiles madrugadores
7. Casi me desheredan
Pura diversión.
Hoy por la mañana Pato se fue al DF. Horror, ya quiero que sea sábado.
Que cholofantástica choloaventura en la cholofiesta de cholograduación... ¡¡LA CHOLOPEDRADA DE NO SABER DE CHOLOCINE!! o-cholo-sea!!!
ResponderEliminarPero cholobueno, un choloplacer cholocompartir cholomomentos así con mi cholohija.