La Parcela de la Berenjena: Los disfraces del 2008: Crónica de la aventura disfracil

Preparen sus ojos, porque esta entrada seguro será larga.

Como seguro sospechaban, este año el esfuerzo de disfraces prometía ser mayor que el del año pasado. Tras pensar en múltiples opciones, el clan había concluído que iría de villanos de Disney... hasta que salió la peli de Batman. El pequeño jitomate (como yo predije cuando vi la peli) no pudo resistir la tentación de disfrazarse de su villano favorito... y el clan no iba a deshacer sus planes de disfraz grupal. Todos seríamos villanos de Batman. Originalmente yo pensé en ser Catwoman (pero la versión de Michelle Pfeifer porque es la buena hahahah), pero fui convencida de tomar un papel más apropiado.

Originalmente, Beto iba a ser Twoface, Huicho Scarecrow, Ilse Catwoman, Pepe Joker y yo Harley Quinn. Todos tendríamos que esforzarnos... pero yo sentí que enfrentaba un gran dilema cosedor... ¿cómo rediantres iba a haceme un leotardo?

CAPÍTULO 1: YOUTUBE
No sabía cómo planearían todos su disfraz, pero comprendí pronto que era muy difícil hacer el disfraz original. Entonces, pepe encontró en youtube una versión de disfraz que lucía ciertamente industrial. En cuanto puse un pie en la ciudad, se lo mostré a Adi, y juntas lo modificamos un poco haciendo un super diseño prototipo 1. Además, decidimos que Adi también iría a la fiesta, y sería The Riddler. Aprovechamos para diseñar su disfraz (diseño que no cambió at all).

Regresando a Cuernavaca, recibí críticas malvadas sobre mi disfraz hipotético. Concluí que buscaría hacerlo como en el comic.

CAPÍTULO 2: TIENDAS DE DISFRACES
Ante la difícil perspectiva, decidimos buscar disfraces por el centro. El jitomate y yo pasamos por muchos sitios interesantes, como la tienda del Chinelo Sexy, donde no hubo leotardos. Paseamos en realidad por como 3 "Miguelitos" y no tuvimos éxito... sí, había un leotardo negro completo... pero costaba $500, y eso en definitiva estaba fuera de mi presupuesto. Sólo salí de ahí con un antifaz negro. Para Pepe tampoco hubo la gran cosa... nada Jokerilmente decente. Ilse me había regalado un gorrito de arlequín de los colores indicados, así que de menos tenía dos elementos a mi favor... pero ningún diseño. De paso, encontramos disfraz de Catwoman a la renta, lo cual pensamos le agradaría saber a Ilse... pero el destino tenía otros planes.

Una vez que estuve en el DF, comenté sobre mis fallas disfraciles y presupuesto, y entonces nació el que sería el modelo oficial de disfraz de Bere. Con el consejo de mi mamá, imaginación, y ayuda de Adi, salió el dibujo de lo que habría de ser mi disfraz. Necesitaba materiales. Aproveché una blusa que pensaba desechar y un leotardo negro corto que ya tenía, y eso sería la primera parte. Robé, de paso, hilo rojo.

CAPÍTULO 3: MÁS PERSONAJES, MENOS PERSONAJES, COSIENDO... Y REGRESANDO A LAS TIENDAS DE DISFRACES
Cuando llegó la siguiente semana procuramos convencer a Abiel de ser Mr. Freeze a lo cual accedió, y a Fanny de ser Poison Ivy. Empero, Abiel prefirió disfrazarse de pene (o eso pretendía por lo menos). El clan no tenía disfraz, excepto Pepe, quien había acudido a la magia de un sastre para conseguir su traje morado y no tener que vivir en la resignación de usar una bata de laboratorio teñida.

Volvimos a recorrer tiendas de disfraces en esos días, que fueron los que aparecen en la entrada de la fiesta cerda en casa de Abiel. Ahí conseguí mis guantes, aunque eran blancos, cascabeles y unos zapatos rojos. Habría que teñir uno. En el mercado y Fanny encontró un blusivestido que le gustó para su disfraz de Ivy. Pepe había conseguido una simpática corbata de moño, un encendedor de broma, maquinita para dar toques (pues la que compró en la feria de Tlaltenango había muerto) y una bomba de humo.

Ese fin de semana yo me quedé en Cuernalandia, así que me fui a Junco a comprar tela roja, negra, y algo de encaje. Dediqué mi tarde de domingo a cortar y coser, y esa noche tenía algo parecido a una bandera a rayas, muñequeras y un collar de encaje. La semana siguiente parecería que por fin tendría mi falda. Mi blusa ya estaba apropiadamente modificada, y para ese entonces ya tenía hecho el dibujito de paint que blogueé hace poco.

Tuve que esperar hasta estar en el DF para ponerme a trabajar en serio. Me fui a enterar de que Adi tampoco llevaba nada de su disfraz, y esa tarde con ayuda de la máquina de coser mi falda quedó lista. Dejé un zapato tiñéndose.

CAPÍTULO 4: HUICHO, ABIEL Y ADI

Ante mi entusiasmo y alegría, ofrecí ayuda para alistar disfraces del resto del clan, y me fui a enterar de que Abiel no iría a la fiesta porque tenía un importante compromiso en su tierra. Por si fuera poco, Huicho había llegado a la conclusión de que no quería ir a la fiesta. Nos quedábamos sin gente. Recluté a Oco para Mr. Freeze, y él accedió aunque luego se volvió vampiro. Beto, por su parte, había acudido también al sastre para hacer su traje blanco y negro. Ilse todavía no estaba segura de en qué momento tendría disfraz, y Adi se ocupaba de cortar tela en el lejano DF.

A pesar de mi berrinche, parecía inevitable que esta fiesta fuera menos clánica. Por si fuera poco, el domingo en la mañana me enteré e que Adi había sido castigada por un mes. Tuve que hacer ojos de perrito triste para convencer a mis papás de que por favor la dejaran ir. Para ese entonces, ella ya tenía su antifaz, y faltaba de coser su vestido. Pepe, mientras tanto, evaluaba la opción de hacer ciertas modificaciones a su disfraz.

CAPÍTULO 5: EL RETORNO DE ABIEL, HUICHO, Y MI VIAJE POR THE GOLDEN PATH
Ya era la semana de la fiesta. El fin de semana Ilse había comprado su pre-disfraz en el Chopo. Gracias a los poderes de Monesvol, a Abiel se le cambió de fecha el compromiso, por lo que necesitaría un disfraz de emergencia. Mientras, me ocupé de hacer ojitos al estilo Pupulon para lograr convencer a Huicho de ir a la fiesta.
Compré el colorante para tela, y todos planeamos ir al centro por última ocasión para que todo mundo terminara de adquirirlo necesario. Como convencí a Huicho, y él tampoco tenía disfraz, concluímos que lo más cómodo era que Abiel fuera el Scarecrow y que Huicho fuera el villano que quisiera... y quiso Clayface, un proyecto de grandes proporciones dado el tiempo que teníamos.

Fuimos al centro, donde todos compraron sus provisiones, paseamos por todos lados, compré el sombrero de Adi y unas simpáticas medias (que verán en alguna de las fotos de abajo). Los chicos comieron paniroles (yo por ser pobre llevaba pan árabe con bologna y queso para comer hahaha). Nos dio la noche en el centro, pero todo mundo tuvo lo básico como para hacer frenéticamente la labor de cosimiento que nos esperaba. Esa noche, mientras teñía mis guantes, comenzó lo que denomino mi odisea por The Golden Path. No me tomaré la molestia de quitarle lo críptico a esta situación... quien lo entienda lo entenderá muy bien. Este viaje mio duró de la noche de miércoles hasta el viernes en la tarde, y está efectivamente plagado de momentos como los que menciona la canción, particularmente llegando a la tarde de viernes. Como sobreviví (igual que el personaje de la rola), pude volver a la madriguera a ayudar a mis amigos con sus disfraces.

CAPÍTULO 6: HORAS ANTES
Enlistaré lo que hicimos

1.Beto terminó de coser su corbara
2.Huicho terminó de coser su cuerpo
3.Abiel terminó de coser su máscara
4.Ilse hizo las costuras de su traje mientras veía batman returns
5.Me maquillé
6.Ayudé a hacer la máscara de Huicho (me siento orgullosa)
7.Ilse hizo su látigo
8.Beto fue a robarle látex líquido a Pepe
9.Maquillé a Beto (me siento orgullosa)
10.LLegó media humanidad
11.Pinté plantitas en el brazo de Fanny
12.Manejé a Tlaltenango, al Centro, a Tlaltenango (de nuevo) y a la Madriguera disfrazada y acompañada de Beto-Bob, quien estaba disfrazado de pirata.
13.Hice eso porque esperaba a que Adi llegara a Cuerna.
14.Adi se arregló.
15.Nos lanzamos a la fiesta
16.Esperamos a llegar todos para hacer nuestra entrada triunfal.

Y ahora, el momento por todos esperado: una selección de fotos: